Mediación Empresarial
Nuestra motivación es la permanencia de la empresa.
Discrepancias con proveedores o clientes, conflictos entre socios y/o con los órganos de administración de la empresa, negligencia profesional, reclamaciones en materia de protección de datos, y en general cualquier otro conflicto en el ámbito empresarial.
Sucesión generacional en la empresa
Uno de los fallos más comunes entre las empresas familiares es la ausencia de planificación en lo que se refiere a la sucesión, al desembarco de las nuevas generaciones para que asuman la gestión del negocio lo que puede provocar la quiebra de la empresa y, como consecuencia, la desaparición de la misma.
Y es que afrontar la sucesión de la empresa familiar “puede resultar complicado”, por la complejidad de las relaciones emocionales
Por ello, es importante planificar esta etapa del negocio con tiempo y minuciosidad. De esta manera, se conseguirán disminuir los problemas y llevar a cabo el relevo generacional con éxito.
Un 70% de las empresas de origen familiar no supera el primer relevo generacional y solo el 15% es capaz de sobrevivir al segundo.
La Mediación es la mejor opción para ello porque al resolver los conflictos de manera pacífica, se mantienen las relaciones entre los miembros de la familia y se evita el litigio y la duración del conflicto, con lo que disminuyen las pérdidas económicas y emocionales que todo conflicto lleva aparejado. Además, la mediación se basa en la participación y la privacidad, lo que sin duda beneficia tanto a la empresa como a la familia.
Discrepancias con clientes y proveedores
En una empresa es importante mantener una buena relación tanto con clientes como con proveedores, dado que la consecución de los objetivos empresariales va inexorablemente ligada al rendimiento, y el rendimiento en una empresa que no goza de buena salud relacional y comunicativa, tanto a nivel interno como externo, no es duradero ni satisfactorio a largo plazo.
Alcanzar un acuerdo que ponga fin a la controversia permite a las partes mantener y fortalecer sus relaciones comerciales.
La resolución de discrepancias con proveedores y/o clientes mediante la Mediación fomenta la continuidad de las relaciones comerciales y su posicionamiento en el mercado.
Reclamaciones en el ámbito de la Protección de Datos
Las sanciones en materia de protección de datos son elevadas.
No obstante, la nueva normativa de protección de datos recoge la posibilidad de graduar las sanciones cuando las partes involucradas se hayan sometido previamente a mecanismos de resolución alternativa de conflictos, como la Mediación.
Si te encuentras ante una denuncia en materia de protección de datos, no lo dudes, acude a nosotros, podemos ayudarte.
Responsabilidad por negligencia profesional
Las relaciones comerciales se asientan sobre un principio de confianza, dotado de un profundo significado ético.
La confianza se crea sobre la certeza de la responsabilidad asumida por proveedor/acreedor y cliente con el objetivo de que la transacción comercial se llevará a cabo cumpliendo los términos establecidos en el contrato.
A veces, la confianza queda implícita en contratos verbales o escritos sin haber explicitado los términos de la misma.
Retrasos en la fabricación y entrega, posibles desperfectos (de fabricación, transporte, etc.), malos entendidos en el diseño, diferencias en el importe final, etc., pueden ser motivo de discrepancias o disconformidad entre lo solicitado y lo recibido.
La Mediación es la solución idónea para tratar estos asuntos porque favorece un clima en el que la comunicación se produce de forma sosegada y pacífica, la relación entre las partes fluye de manera que las discrepancias y malos entendidos se aclaran, restaurando la confianza entre las partes a través de la asunción de las responsabilidades que equitativamente puedan corresponder.
Conflictos entre socios y/o con los órganos de administración de las sociedades mercantiles.
Es normal que las expectativas vitales y profesionales entre aliados empresariales -socios- cambien a lo largo del tiempo, lo que puede derivar en discrepancias que, en ocasiones, provocan el distanciamiento o la ruptura.
El uso de la Mediación resolverá el conflicto presente y ofrece, para el futuro, un protocolo de actuación que marque unas sencillas normas o pautas que ayuden a anteponerse a todas las posibilidades de conflicto que puedan surgir más adelante y definir la actuación a seguir.
